Carmen Gracia, Córdoba: “Antes de volver es imprescindible que a todos los jugadores les hagan test para asegurarnos que dan negativo”
Publicada el 13-04-2020 a las 09:30:25
Una bronconeumonía ha apartado a Carmen de su actividad diaria como sanitaria y después de 10 días en los que ha estado “muy preocupada” por su salud y por la de los que le rodean, ahora ve el final del túnel y confía en que “la semana que viene pueda reincorporarme a mi trabajo. Cuesta mucho dejarlo cuando te diagnostican y tienes que irte, pero tenía que estar en aislamiento. Ahora tendré que repetirme las pruebas y adaptarán mi puesto de trabajo para no estar en contacto con pacientes con COVID-19, pero estoy deseando volver para echar una mano a mis compañeros”.
Licenciada en la especialidad de medicina de trabajo por la Universidad de Córdoba está “siempre en permanente contacto con los jugadores y a su disposición para lo que necesiten. Ejerzo como su médico de cabecera para resolver cualquier duda o dolencia que tengan, porque lo más importante es que no salgan de casa. Están llevando bien este confinamiento, muchos son costaleros y por su devoción religiosa están acostumbrados a los sacrificios y, por supuesto, son muy respetuosos con lo que marca el preparador físico”.
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Carmen está completamente integrada en el club hasta tal punto que la afinidad que mantiene con los jugadores se traduce en el apodo cariño con el que le conocen: ‘Mamidoc’. “Siempre estoy con el equipo en los partidos de casa y en los entrenamientos, pero cada vez que puedo y no tengo guardia viajo también con ellos a los encuentros de fuera”.
Respecto a la vuelta a la competición, la doctora Gracia comenta: “Desde mi experiencia habría que realizar un pretemporada de 2 ó 3 semanas mínimo y reorganizar al equipo en dos grupos para que estén separados, incluso en el vestuario, e ir viendo cómo evoluciona. Dudo mucho que antes del 15 de mayo pueda hacerse algo y es imprescindible que a todos los jugadores les hagan test para asegurarnos que dan negativo, y entonces sería conveniente concentrarlos en un mismo sitio sin desplazarse”.
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Y añade: “Si pensamos en la salud de los deportistas y esperamos realmente el tiempo prudencial, nos vamos a septiembre u octubre porque cuando vayamos sabiendo los datos más exactos, veremos que igual hay más positivos. No se puede trabajar con síntomas leves porque se expone al deportista y a su familia. Además, deberíamos tener 100 mascarillas por persona y por mes para afrontar la vuelta”.
Trabaja en urgencias desde 1986 y nunca ha vivido una situación similar: “Tuvimos la alerta del Ébola y la gripe Aviar hace unos años y aprendimos protocolos, pero fueron pequeños conatos. Ahora te encuentras con una de las experiencias más duras que está dejando esta pandemia que es cuando estás en puerta del hospital y llegan personas con síntomas de COVID-19 y les dices que les vas a hacer la prueba. La gente palidece e intentas ayudarle durante la espera. Es una situación horrible”.