Hay una portería solitaria en el Colegio Agustinos, rodeada de gritos de niños y adolescentes, una portería que, aunque como cualquier otra en apariencia, es una de las piezas que más relación tiene con los éxitos del Fútbol Sala español. Hace dos décadas, Enrique Boned Guillot (Valencia, 1978) tuvo su primer contacto con el Fútbol Sala bajo sus postes de metal, intentando parar los disparos de sus compañeros y rivales, sin más motivo que divertirse, pasión por pasión entre horas y horas de estudio.
No tardó mucho en cambiar su posición y comenzar a tener más contacto con el balón, como jugador de pista, siempre atento a cada jugada, siempre animando a sus compañeros, siempre que fallaba enfadado consigo mismo por hacer lo que tenía pensado. Sobre esas pistas de cemento comenzó la leyenda de Kike Boned, que es a su vez la leyenda del Fútbol Sala español. Tardó en descubrirse y es que el valenciano siempre tuvo claro que el deporte siempre debe ir unido a la educación.
No es extraño que su debut en la máxima categoría ocurriese a los 17 años justo después de un examen de filosofía, del que tuvo que salir en tiempo record y prepararse para sustituir al cierre del Valencia Vijusa, Toto. Tampoco que lo hiciese ante el Inter Movistar, gran rival en múltiples finales junto con el FC Barcelona Alusport en los últimos años de su extensa, maravillosa, carrera deportiva.
Fue la camiseta del Valencia Vijusa con la que comenzó a despuntar, y con la que se ganó a pulso el título de Jugador Revelación en la temporada 97/98, desde donde salió para formar parte del histórico CLM Talavera, campeón ya de Europa ante el Dínamo de Moscú y de Liga, uno de los equipos más fuertes de la LNFS. Kike Boned siempre creció entre los más grandes antes de ser el más grande sobre la pista. Después de aprender de Joan Linares, Fran Torres, Marcos Sorato, Justo Cáceres, Andreu Linares, entre otros, a las órdenes de Tino Pérez, Kike puso rumbo de nuevo al Valencia tras la desaparición del equipo manchego. Esa temporada fue el preludio de una relación exitosa, que ha hecho de Kike, como él mismo dice, un “murciano de adopción”.
Nombrado ‘Mejor Cierre de la LNFS’ y parte importante de la selección española de Javier Lozano, actual presidente de la Liga nacional de Fútbol Sala, esa campaña 00/01 fue la que entregó a Kike un pedazo de historia del Fútbol Sala. Ya había debutado con ‘La Roja’ en 1998 ante la Selección Universitaria de Portugal (3-12) y ganado el IV Naciones. Pero fue Guatemala la que le ofreció una de las alegrías más intensas de su trayectoria. El benjamín de aquella España que consiguió derrotar en la final a Brasil, el joven cierre que se fijaba en todos los detalles de Santi Herrero, y que jugó una media de 08:03 minutos en el Mundial de 2000 tocó el cielo ante Brasil, una Final que no pudo jugar.
Campeón del Mundo, subcampeón de Liga, mejor cierre de la LNFS y una inteligencia estratosférica, conformada por su única forma de comprender el Fútbol Sala y por aprender de los más veteranos, Kike llega en la 01/02 al equipo con el que ha conseguido la mayor parte de sus éxitos a nivel deportivo: ElPozo Murcia. Kike acababa de llegar al Palacio de los Deportes pero se ganó a su afición – y por su personalidad a la de los demás equipos- en tiempo récord. Los aplausos fueron la banda sonora de una temporada mágica, que continuó con la victoria en el Torneo FIFA Singapur, con la Eurocopa y con su primer MVP de tres, es el único junto a Lenisio que ha ganado tantas veces el galardón.
Y con esa camiseta grana llegaron los éxitos más inmensos de Kike. Por ejemplo el Mundial de 2004, al que llegó como uno de los líderes del equipo y con un papel mucho más destacado que cuatro años antes; las Eurocopas de 2005, 2007, 2010 y 2012; las cuatro Ligas; tres Copas y cuatro Supercopas; los dos MVP restantes para conseguir un récord aún hoy vigente y los seis trofeos –suma un total de siete- como Mejor Cierre de la LNFS y dos subcampeonatos del Mundo (2008 y 2012), perdidos ante Brasil en la Final. Siempre perfecto en defensa y con un promedio de goles enorme, siempre asistiendo y apareciendo desde atrás, casi invisible para celebrar los cientos de goles que ha marcado con ese gesto tan suyo de morderse las uñas.
Su último partido con España le encumbró como el jugador que más veces ha vestido la camiseta de la Selección 180, una más que otra leyenda que ha ido de la mano del valenciano en el combinado nacional y poderosísimo rival en la LNFS: Luis Amado.
Este amate de la paella y de ‘Los Pilares de la Tierra’ jugó su último partido internacional ante Grecia el pasado noviembre de 2013, una despedida de uno de los eternos capitanes de La Roja. Eterno capitán también de ElPozo Murcia donde ha pasado una década y media, creciendo en cada partido, aumentando su rol, pasando de compañero perfecto de jugadores como Serrejón y Paulo a líder indiscutible del equipo. Respetado y admirados por compañeros y rivales, Kike Boned personifica el juego limpio y la caballerosidad sobre la madera. Esa que a partir del mes de julio, como tantos aficionados, no importa el color de su camiseta, le echará de menos.
PALMARÉS KIKE BONED
- 180 Veces Internacional
- 2 Mundiales
- 5 Eurocopas
- 1 Torneo FIFA Singapur
- 1 Torneo IV Naciones
- 4 Ligas
- 3 Copas de España
- 3 Supercopas de España
- 1 Recopa de Europa
- 1 Copa Ibérica
- 3 MVP LNFS
- 7 Veces Mejor Cierre LNFS