El Barça da un paso de gigante hacia el campeonato regular en Tudela (2-8)
El Ciudad de Tudela fue testigo en la Jornada 28 de Primera División de un golpazo sobre la mesa del Barça para reivindicar su trono liguero y poner sobre aviso a todos los demás candidatos al título de Liga. Los barcelonistas se dieron un festín a costa de un Ribera Niverra FS sobrepasado a pesar de su buena puesta en escena. Los Ferrao, Lozano, Pito y compañía se lucieron de cara a puerta hasta engrosar el resultado a un 2-8 indiscutible en el que incluso el canterano Puigvert debutó como goleador en la élite.
Sobrevivió el Barça a una puesta en escena ‘mandona’ de un Ribera Navarra FS que obligó a Dídac Plana a firmar un arranque omnipresente bajo palos para poder mantener el 0-0 en el marcador. Contenían los culés las embestidas locales como podían, pero aun así la cara de Marcao firmó la primera gran salvada de la tarde en un remate a bocajarro de Dyego. La clara ocasión visitante fue una excepción en medio de un partido con los naranjas volcados en campo rival, llegando incluso a poner en pie al graderío del Ciudad de Tudela con un golpeo de Marcao desde área propia que superó a Dídac, pero que se marchó por encima del travesaño tras un bote decisivo.
La mejoría azulgrana coincidió con los minutos en los que el correcalles inicial abrió paso a la mesura, con menor dominio tudelano y con el Barça aprovechando sus opciones de contraataque para, después de resistir contra el vendaval, asestar el primer golpe. Una fugaz transición barcelonista tuvo como colofón el 0-1 de Ferrao, rematador de primeras tras una tremenda galopada de Lozano por banda izquierda. Una vez superada su fase más crítica, el líder de Primera sacó a relucir su cara dominadora, dando pasos hacia adelante y llegando a reclamar ostensiblemente un penalti por mano que nunca llegó a señalarse, pero que generó un desconcierto clave para que Matheus se plantase en solitario frente a Marcao. Sin embargo, el ‘3’, que buscó una ‘delicatessen’ en la definición, se topó con el arquero. Quien sí encontró la manera de batirle fue Pito, que terminó de anestesiar la primera mitad ejecutando el 0-2 después de bailar con la pelota.
Noqueado, el Ribera Navarra FS continúo sufriendo los daños del rodillo barcelonista nada más reanudarse el choque. Trece segundos tardó Sergio Lozano en perforar las mallas de la portería local por tercera vez, dando muestras de un despliegue físico de otro nivel. Los naranjas se convirtieron en un imán de infortunios, ya que escasos instantes después tuvieron que lamentar la lesión de Nacho Gómez por un feo gesto de tobillo. La tónica siguió su curso hasta teñir por completo la jornada de color azulgrana, viendo a Ferrao dar forma a su doblete y a un contundente 0-4 que obligó a Pato a mover ficha.
Con más de cuarto de hora por delante, los naranjas optaron por dar salida al portero-jugador, asumiendo unos riesgos que terminaron siendo una condena aún mayor. A la carrera, el Barça llegó a perdonar goles cantados en superioridad numérica ante un Marcao vendido, pero el canterano Puigvert no se apiadó al igual que sus ‘mayores’ y se sumó al festín adjudicándose el 0-5 que dejó la cita encarrilada. El golpe sobre la mesa de los de Jesús Velasco adquirió unas dimensiones estratosféricas que fueron a más aún con el sexto tanto en la misma dirección, obra de un Ferrao que salió de Tudela con un ‘hat-trick’ bajo el brazo.
Poco más podía hacer el Ribera Navarra FS en los compases finales que mitigar una caída anunciada. El partido perdió cualquier guion lógico en este momento y el marcador se engrosó hasta límites insospechados. Terry, autor del 1-6, recortó distancias de manera anecdótica, puesto que un zapatazo de Sergio Lozano y un disparo desde campo propio de Povill a puerta vacía abrieron más tierra de por medio. Ya en el minuto 38, la diana de Joao Miguel para los locales cerró definitivamente un partido loco y que deja al Barça a las puertas de ser Campeón de Liga.