Jimbee Cartagena supera a Real Betis Futsal en su sexto partido consecutivo puntuando (3-0)
Con un minuto de juego disputado, el Jimbee ya tuvo la primera ocasión. Juanan, algo esquinado, disparó, estrellando la pelota en la madera. Era un aviso de lo que estaba por venir.
Habían pasado solo cinco minutos cuando los locales abrieron la lata. Un magnífico pase de Javi Mínguez lo remató Bebe de tacón. Bonito gol del cordobés para estrenar el marcador.
En el ocho de juego, el Jimbee pudo ampliar la ventaja. Lucão, que reaparecía sobre el parqué y fue ovacionado por el público cartagenero, terminó una buena jugada de pizarra estrellando la pelota en la madera. Era el segundo balón al palo del cuadro melonero en este partido.
Buscó la igualad el conjunto verdiblanco desde la larga distancia, pero los lanzamientos no encontraron el arco de Chemi. Fueron insistentes los de Bruno García durante varios minutos, aunque no terminaron de encontrar el objetivo. Bien el Jimbee en tareas defensivas durante esa fase del encuentro.
Sí lo logró el equipo de Duda, que amplió su ventaja por mediación de Motta. ‘Il Cannoniera’ fusiló desde lejos con pierna derecha y la pelota entró limpia en la portería de Molina.
Ya en la segunda parte, el Betis saltó a cuarenta por veinte con intención de remontar. Casi acorta distancias Lemine. El bético soltó un potente disparo que paró Chemi. El esférico, tras tocar el mazarronero, se estampó contra el larguero.
También tuvo sus oportunidades el Jimbee, que bajó su caudal ofensivo, pero siguió asomando por el arco visitante. Una de esas ocasiones fue de Jesús Izquierdo. El cierre lo intentó tras una buena jugada individual, pero el cuero no tomó dirección a portería. Otro que lo buscó fue Pablo Ramírez; su lanzamiento tampoco cogió el carril correcto. También Bebe, aunque en esta ocasión fue Molina el que la mandó fuera. A partir de la media hora, las tornas cambiaron y el Jimbee tuvo más presencia en campo rival.
Continuó el flujo de ocasiones para los meloneros, que seguían sin poder hacer el tercero, el de la calma. Darío le pegó con todo, pero Molina anduvo felino para evitar el tanto. Javi Mínguez, por su parte, culminó una buena combinación, pero su disparo se volvía a estrellar en la madera. Acto seguido, Juanan, con una picada preciosa, también mandó el balón al palo.
La calma llegó en el 39 de juego. Mellado agarró la pelota, recorrió media pista sorteando a todos los rivales que aparecían a su paso, envío el cuero al segundo palo y Bebe la mandó para dentro. Era el 3-0, resultado con el que culminó el envite.