Primera División
ATP Ilum. Tudelano Ribera se lleva sobre la bocina el duelo vital por la permanencia ante WANAPIX AD Sala 10 (1-2)

El desenlace más cruel del fútbol sala. Un gol a falta de solo diez segundos privó a Wanapix de un resultado más justo tras un partido en el que mereció mucho más. Pese a generar innumerables ocasiones y dominar amplios tramos del encuentro, la falta de acierto en los metros finales acabó pasando factura.
El que llegase dos minutos tarde al Pabellón Siglo XXI se perdió un inicio de partido vibrante, de esos que enganchan a este deporte. En la primera jugada, Brasesco realizó una acción brillante para dejar solo a Tomi, quien no perdonó y adelantó a los locales. La respuesta de Ribera Navarra no se hizo esperar y, en la siguiente jugada, Terry igualó el marcador con un disparo tras un saque de esquina. A partir de ese momento, la igualdad y las urgencias clasificatorias de ambos equipos se hicieron evidentes. Wanapix, más incisivo, forzó numerosas faltas del rival, aunque sin la puntería necesaria. La ocasión más clara llegó con un disparo a la media vuelta de Óscar, pero Raúl evitó el gol con una gran intervención. Por su parte, Tudelano Ribera Navarra fue ganando presencia sobre la pista, llegando a inquietar a Iván en un par de ocasiones, la más peligrosa un disparo de Malaguiti que se estrelló en la madera. Justo antes del descanso, Rivera lo intentó con un potente lanzamiento que Raúl desbarató con una gran parada junto al palo.
La segunda mitad comenzó con un Wanapix decidido a llevarse el partido. Desde el primer minuto, los maños se hicieron con el control y generaron peligro, primero con un disparo de Rivera que se marchó alto. El dominio era absoluto, pero la falta de acierto y la solidez defensiva del rival impedían el gol. Tripodi salvó sobre la línea una vaselina de Rivera y Raúl volvió a ser determinante con dos paradas clave ante Tomi y Rivera.
A falta de tres minutos, Jorge Palos apostó por el portero-jugador y el equipo maño logró hilvanar buenas jugadas, pero el gol seguía resistiéndose. Raúl, en una actuación soberbia, volvió a salvar a su equipo. Y cuando el empate parecía inevitable o incluso se intuía una posible victoria local, llegó el mazazo. Un contragolpe letal finalizado por Terry a falta de diez segundos desató la alegría visitante y sumió en la desolación a Wanapix, que tuvo una última oportunidad en un disparo lejano de Ortego que rebotó en la defensa.
