Tras marcharse sin premio del primer partido en Mallorca, los culers no tenían red de seguridad y tenían que ganar en casa para alargar la eliminatoria hasta el tercer partido. El tricampeón de Europa, por su parte, quería aprovechar su oportunidad de pasar a la final por la vía rápida, siendo los visitantes quienes han comenzado más enchufados. Al menos, con más ocasiones, sobre todo un larguero de Gordillo que ha despertado a los culers, que han encontrado el camino a la portería.
o ha hecho primero Pito, culminando una gran jugada de tiralíneas (1-0, min. 7), y después Antonio. Él mismo ha recuperado y ha seguido la conducción de Adolfo para sorprender al palo corto del portero (2-0, min. 11). Los de Tino Pérez habían dado un primer paso para seguir vivos en la Liga, pero Palma había entrado bien en el partido y ni siquiera los dos goles les han hecho bajar mínimamente los brazos. Los baleares han dominado el juego en la primera parte, pero la defensa del Barça y Dídac los tenían controlados en todas las fases menos una: la estrategia.

Tras un saque de banda ha recortado distancias Machado (2-1, min. 14), y en el último minuto antes del descanso ha empatado Fabinho tras un córner (2-2, min. 20). La segunda mitad ha empezado con algo de caos en la pista, con muchas transiciones, el Palma atacando más y mejor y Dídac evitando el tercero con un par de buenas paradas. Pero en medio del caos ha emergido la figura de un gigante brasileño, que se ha inventado dos goles de la nada. Porque Pito ha generado una jugada que ha terminado en un gol casi involuntario de Touré (3-2, min. 25), y a los pocos segundos ha protagonizado un gol de fe cuando parecía imposible (4-2, min. 25).
Pero, de nuevo con la estrategia, Palma se ha vuelto a poner a uno, con el doblete de Fabinho en otro saque de esquina (4-3, min. 26). Quedaba un mundo, y viendo cómo se había desarrollado el partido parecía imposible que el marcador no cambiara más, pero así ha sido, afortunadamente para los culers. No sin sufrimiento, porque Palma ha puesto todo su arsenal ofensivo, y porque ni Antonio primero, ni Pito después han podido sentenciarlo transformando un doble penalti, pero el Barça ha sido capaz de resistir con todo y con todos.

Porque Lozano ha entrado más y más intenso, y Sergio González ha vuelto después de un mes de baja. Todos los recursos, y algo de fortuna con un palo y las manos salvadoras de Dídac, han hecho falta para poder cerrar un triunfo que devuelve la eliminatoria hacia las Islas Baleares, donde se decidirá por completo el finalista este viernes a partir de las 21.00h.