Pablo Ramírez, del Jimbee Cartagena Costa Cálida, pugna por el balón
Pablo Ramírez, del Jimbee Cartagena Costa Cálida, pugna por el balón
El Palacio de los Deportes de Cartagena fue testigo de una noche mágica para el Jimbee Cartagena Costa Cálida, que, aunque figuraba como visitante en el Grupo A, jugó con la fuerza de un equipo respaldado por su público. En un despliegue de talento y contundencia, los cartageneros aplastaron al Meta Catania por 1-8, dejando claro que su meta en la Champions League de Fútbol Sala está puesta en la Final Four.
El marcador se abrió temprano, cuando Pablo Ramírez aprovechó un pase de Darío Gil y, en el minuto 2, empujó el balón a puerta vacía. Sin embargo, los italianos respondieron en el 9’ con un zurdazo de Michele Podda que atravesó la defensa y dejó sin opciones a Chemi Oliver. Ese fue el único destello ofensivo del Catania, ya que el Jimbee recuperó el control con rapidez.

Darío Gil marcó el 1-2 en el minuto 12, devolviendo la ventaja al equipo cartagenero antes del descanso. En la segunda mitad, el vendaval ofensivo del Jimbee se desató. Pablo Ramírez sumó su segundo tanto, seguido de un gol del brasileño Waltinho Fernandes. La noche se convirtió en una exhibición cuando Francisco José Cortés marcó tres goles consecutivos desde el doble penalti, demostrando su precisión y temple. Para sellar la goleada, Muhammad Osamanmusa cerró la cuenta con un gol en los minutos finales.