Los jugadores del Palma Futsal celebran un tanto.
Los jugadores del Palma Futsal celebran un tanto.
Palma Futsal se impuso al Burela FS en el encuentro que abrió la Jornada 8 de Primera División. Los baleares se hicieron con los tres puntos gracias a los tantos de Eloy Rojas y Pope, consiguiendo la victoria después de tres partidos sin hacerlo. Por su parte, los bureleses sufren su séptima derrota seguida, que les mantiene en la última posición de la tabla en una temporada en la que no conocen el triunfo.
Cainan tuvo la primera ocasión clara del encuentro en el minuto cinco, con un disparo que repelió Kaluza. Después fue Mancuso quien probó al meta polaco, que desvió el balón a saque de esquina. Respondieron los gallegos con un buen disparo que paró Fabio. En la siguiente jugada Iago Míguez estrelló el balón en el larguero, cuando lo tenía todo de cara para abrir el marcador.

Eloy Rjas adelantó a los locales en el 13, tras finalizar una jugada de estrategia de falta con un disparo directo a la escuadra. A falta de dos minutos para el descanso Raúl Cmapos estuvo a punto de hacer el segundo con un disparo a la salida de un saque de esquina que se estrelló en el larguero. El encuentro se marchó al descanso con la ventaja por la mínima favorable a los locales, tras una primera mitad dominada por los de Vadillo.

Los palmesanos saltaron a la pista en la segunda mitad con la intención de poner tierra de por medio en el marcador, asediando la portería defendida por Kaluza. Lo baleares dominaban el partido, pero sin conseguir demasiadas ocasiones ante una férrea defensa burelesa. La segunda parte llegó a su ecuador con todo abierto, de cara al tramo final del encuentro.

Los de Riquer no se amedrentaban y Burela estuvo a punto de empatar el partido en el 33, pero el balón de Quintela no encontró rematador en el segundo palo. Pero fueron los locales quienes anotaron el 2-0 tras un remate de Pope, asistido por Eloy Rojas. Riquer empleó a Quintela como portero-jugador con la intención de recortar distancias a través del juego de cinco, pero el resultado ya no se movió.