Con una dilatada trayectoria en la LNFS, Carlos García regresó el pasado verano al club que le vio crecer. En el año del debut del Colo Colo Zaragoza en la categoría de plata, y después de pasar por equipos como Elche CF, FSD Puertollano o Ríos Renovables Zaragoza, el cierre Internacional Sub-21 ha sido uno de los jugadores más destacados del combinado aragonés durante la primera vuelta. Con el segundo tramo de la competición por delante, el cierre maño confía en que el equipo consiga la permanencia.
Pese a la situación actual del equipo, inmerso en los puestos de descenso, el jugador aragonés se muestra optimista. “Para un equipo recién ascendido siempre es difícil y complicado el periodo de adaptación a la categoría. Tuvimos una pretemporada exigente jugando contra equipos de Primera y gracias a ello nos mentalizamos de lo que se nos venía encima”.

“Somos un equipo humilde con el presupuesto más bajo de la categoría. Es difícil estar más arriba de lo que estamos. El equipo tiene un objetivo claro que es mantener la categoría y si seguimos con la misma dinámica de trabajo y misma exigencia al final de la temporada estaremos satisfechos con lo realizado”, afirma.

De cara al nuevo año, el deseo del cierre aragonés no es otro que “lograr la salvación y que nos respeten las lesiones”. Además, señala que esta temporada la categoría de plata está muy igualada, con el condicionante de que: “Quizá otros años era menos necesario conseguir tantos puntos para conseguir la salvación”.

“Equipos como Betis o Burela compiten como plantillas de Primera División. Este incremento de nivel en la categoría favorece que jugadores jóvenes de distintos equipos se curtan y puedan con esa piza de suerte, disfrutar de jugar en Primera en un futuro”, finaliza.