Junto a ellos, un líder como Abramov, elegido mejor jugador de la Superliga de Rusia conquistada por su equipo, el Sinara de Ekaterinburgo. La talentosa dupla del Partido Comunista, Asadov y Niyazov y el tridente del Tyumente formando por Antoshkin, Abramovich y Milovanov, sin olvidar el todoterreno del Benfica, Chishkala.
Uzbekistán afronta el segundo Mundial de su historia y no solo buscará su primera victoria en una cita mundialista, además querrá clasificarse para octavos de final. El salto de calidad uzbeko al panorama internacional se produjo con la llegada de José María Pazos (Benfica) y el actual seleccionador Bakhodir Akhmedov sigue el camino trazado por el técnico español. Capitaneados por Rakhmatov, cuentan con una plantilla muy renovada en la que brillan el portero Elmudorov, el joven Nishonov y su mejor jugador, Choriev.
Egipto ha registrado progresos notables en los últimos años. Tras caer eliminada en la primera ronda en tres de sus cuatro primeras participaciones en la Copa Mundial de Futsal de la FIFA, consiguió alcanzar los octavos de final en Tailandia 2012, para luego lograr su mejor resultado en la última edición, celebrada en Colombia 2016 hace cinco años, al llegar a cuartos. Será la séptima participación consecutiva de los Faraones, que reformularon su staff técnico en mayo colocando en el puesto de seleccionador a Sameh Saleh y su predecedor, Hisam Saleh, como director técnico, tras caer goleador en la final de la Copa de Arabia ante Marruecos.
Guatemala disputará su quinto Mundial y lo hará con el ex jugador y capitán, Jaime Estuardo de León, como seleccionador de la Azul y Blanco, que buscará clasificarse por primera vez en la historia para la segunda fase. Roberto Alvarado, flamante fichaje del Unión África Ceutí, es uno de los jugadores más brillantes de un bloque en el que también destacan Lester Arévalo, José Mansilla o Edgar Santizo.