El Noia Portus Apostoli se mide este sábado al Santiago Futsal en un especial derbi gallego. Jorge Bello, que ingresó en la cantera noiesa en las categorías inferiores, es uno de esos veteranos, a la vez joven, de un vestuario que sueña con salvar la categoría en Segunda División. Once años vistiendo la elástica del Noia y un sentimiento de pertenencia especial, hacen del noiés un referente dentro del Club gallego.
Once años son los que lleva J. Bello en el Noia, por lo que se ha convertido en referencia para los jugadores de la base. El gallego, alterna el primer equipo y el filial, situación que en ocasiones “es difícil sobre todo cuando no entro en las convocatorias. Aun así, intento ver lo positivo, que en mi caso es que puedo seguir jugando y compitiendo cada fin de semana”.

Así mismo, se considera humilde, buen compañero y, sobre todo, trabajador: “Espero tener mi oportunidad con el primer equipo y por eso estoy trabajando duro, esperando a que llegue mi momento porque estoy seguro de que antes o después llegará”.

La pasada campaña el canterano ya debutó en la categoría de plata, cumpliendo un sueño de los que tiene todo jugador: “No se me olvidará nunca, marqué gol a pase de Kohei”. Al comienzo de esta temporada y con Julio Mougán en el banquillo, J. Bello dispuso de minutos, aunque poco a poco fue perdiendo protagonismo.

“La situación del equipo es complicada y es normal que el entrenador confíe más en otros jugadores”, asegura. A pesar de ello, el canterano no tira la toalla y continúa entrenando con el primer equipo. “Me encuentro bien entrenando con el equipo, me siento un jugador más de la primera plantilla”.