Tras una dura primera vuelta a título personal, Nacho Pedraza cerró el 2018 anotando un gol en el empate ante Naturpellet Segovia y firmando buenos minutos en la derrota del Viña Albali Valdepeñas frente a Levante. De cara al 2019, el pívot madrileño espera recuperar su mejor versión y contribuir con goles en la búsqueda incesante de la salvación.
Pese a unos días de parón y tras la consecución del trofeo diputación, el Viña Albali Valdepeñas vuelve al trabajo para preparar el próximo encuentro de Liga regular ante Peñíscola RehabMedic: “Aunque en la primera vuelta no hemos estado al nivel que se esperaba estamos fuera del descenso. Conseguir el trofeo diputación ha sido una inyección de moral y esperamos que nos de fuerza para todo lo que resta de temporada que va a ser muy bonito”.

En cuanto al momento personal que atraviesa el jugador, el pívot declaraba que “ha sido una primera vuelta dura, he tenido problemas físicos y personales. Aun así, si lo das todo, trabajas y luchas como llevo haciendo yo día tras día durante los dos años que llevo aquí, al final las cosas salen. Y eso es lo que intento, nadie me puede achacar que siempre me dejo todo”.

Poco a poco el conjunto vinatero va cogiendo el sello del míster, David Ramos: “Cuando viene alguien nuevo siempre es una inyección de moral y siempre cambian cosas. Además, han llegado jugadores nuevos y eso son nuevos alicientes que hacen que se intente mejorar y cambiar ciertas cosas. Ahora tenemos que ajustar detalles para conseguir la permanencia que es el objetivo del club”.