La jornada 25 de la primera división de fútbol sala nos dejó uno de los gestos más bonitos que se pueden dar en un deporte. Un acto del cual todas las generaciones deben tomar nota para difundir los valores del fútbol sala que tan especial lo hacen.
Nos referimos al Fair Play que ocurrió sobre el parqué del Ciudad de Tuleda, en el encuentro entre el Aspil Vidal Ribera Navarra y el Industrias Santa Coloma. El conjunto naranja en ese momento iba 3-1 por delante en el marcador, y el reloj marcada el minuto 35.

La jugada sucedió así: Tripodi recibe un balón al espacio en la banda derecha, el portero de Industrias Santa Coloma, Miquel Feixas, decide salir de sus dominios para despejar ese balón, pero al hacerlo el jugador del Aspil Vidal Ribera Navarra también mete la pierna y acaba desequilibrando al guardameta lo que provoca una caída muy fea por parte del catalán.

El cuero despejado vuelve al argentino dentro del área, que no sabe que su rival está tendido en el suelo, y anota el 4-1. Al darse cuenta de tal situación, Aspil Vidal Ribera Navarra decide que ese tanto no es justo que suba al marcador ya que el portero de Industrias Santa Coloma estaba tendido en el suelo por el encontronazo y acto seguido se deja marcar el 4-2, obra de Cardona, tras el saque inicial.

Un gesto de deportividad que arrancó los aplausos del respetable y que sirvió para dar un ejemplo de Fair Play. El gesto comenzó a extenderse como la pólvora por redes sociales y todos con un unánime mensaje: Un apoyo incondicional a unos valores que hacen al fútbol sala diferente.