Iago Rodríguez, jugador de O Parrulo Ferrol, ante Nano Modrego, de Fútbol Emotion Zaragoza. (Foto: Hugo Nidáguila / Instantes Momentos Fotográficos).
Iago Rodríguez, jugador de O Parrulo Ferrol, ante Nano Modrego, de Fútbol Emotion Zaragoza. (Foto: Hugo Nidáguila / Instantes Momentos Fotográficos).
Nano Modrego, jugador del Fútbol Emotion Zaragoza, concedió una entrevista a la Liga Nacional de Fútbol Sala en la que habló sobre como está viviendo estas semanas de confinamiento. El pívot del conjunto maño hizo hincapié en la importancia de que esta situación nos sirva a todos como enseñanza de “lo felices que éramos y no lo sabíamos”, además de confesar lo que hará cuando se regrese a la normalidad.
“Estamos llevando esta situación de la mejor manera que se puede llevar, tratando de sacar lo positivo de todo esto. Esta situación nos tiene que servir como lección para todos de lo felices que éramos y no lo sabíamos. Me estoy acercando aún más a mi familia, sobre todo a mis hijos, disfruto mucho de estar con ellos”, explicó el jugador del Fútbol Emotion Zaragoza. 

Sobre como mantiene la forma desde casa, apuntó que: “Cada día realizamos una sesión de entrenamiento que nuestro preparador físico Héctor Gadea nos mandó. Los lunes y los viernes tenemos trabajos de fuerza, los martes, jueves y sábados tenemos trabajos más cardiovasculares y los miércoles trabajo preventivo”.

En cuanto a lo que más echa de menos del Fútbol Sala: “Echo todo de menos del Fútbol Sala. Poder ir al pabellón, entrenar cada día, calzarme las zapatillas, poder salir a la pista del Siglo XXI a entrenar con mis compañeros, poder dar un simple pase…”.

El pívot maño reflexionó que: “Nos tenemos que dar cuenta de lo felices que éramos sin saberlo. Podíamos salir a dar un paseo con nuestros hijos, quedar a comer con nuestra familia, poder celebrar un cumpleaños con amigos, salir a un bar a tomar algo con tu mujer, poder ir al colegio a dar clase a mis alumnos. La vida nos ha puesto en esta situación para que nos demos cuenta y prioricemos las pequeñas cosas de cada día”.

Por último, habló de lo primero que hará cuando esta situación termine: “Me apetece llevar un día normal, porque ahora los niños pueden salir una hora al día y te da cierta libertad, pero lo que me gustaría es hacer un día normal, de ir al trabajo y al colegio, de disfrutar con mi familia y después entrenar. Hay que disfrutar cada día y cada segundo de nuestra vida al máximo”.