“Hay días que cuesta más llevarlo, pero en general lo llevo bien. Tengo mucho tiempo libre y puedo hacer cosas que antes no hacía. Ahora paso mucho tiempo con mi hija y es algo que me encanta. También aprovecho para hacer bricolaje en casa”, afirmó Kiwi.
Sobre el hecho de entrenar desde casa señaló que: “Me he ido adaptando a entrenar desde casa. Hacemos videollamadas con el preparador físico y realizamos entrenamientos conjuntos que ayudan a llevar mejor esta situación. Además, estoy aprovechando para realizar ejercicios para fortalecer mi tobillo, que es donde más lesiones he tenido”.
Por último, confesó que: “Lo que más echo de menos del Fútbol Sala es jugar, es para lo que entrenamos todos los días y lo que nos permite llegar al fin de semana motivados y concentrados para salir a competir. También echo de menos el día a día con los compañeros”.